Una pintoresca actuación de la selección de Ocampo, que a puro toque le ganó el tercer partido al hilo, por tres goles de diferencia.
El partido comenzó con un Dep. Fontelo agresivo, donde se encontró con una ventaja de dos goles.
Del otro lado, Ocampo, desentendido del juego, con la cabeza en otro lado. Hubo reacción, al darse cuenta, de que no estaban en sintonía.
Los capitaneados por Martín Fontelo perdieron la compostura, apostando al juego excesivamente desmedido, cuando quizá podrían haberle amargado la tarde a Ocampo, que mostró algunas desatenciones defensivas.
Con criterio, y apoyados en la omnipresencia de Nicolás Magri, (empató el partido, un gol desde la mitad de la cancha, una media volea-tijera al ángulo, un golazo entre 4 hombres, entre otras maravillas), Ocampo mereció un poco más.
Además, Melissari tuvo una gran labor en el arco, evitando con grandísimas atajadas, goles ajenos. Un Goitea que no afloja y que ya ganó su lugar en el equipo.
También Cione está volviendo a ser el jugador que era, mostrando destellos de su juego, y con el gran Mareque que hace cosas increíbles, y golazos.
Demasiado para un pobre Deportivo Fontelo, que no hizo más que ratificar por qué no puede vencer hace 21 días. Decile papá.
Premio Maradona: Nico. Un gol más lindo que el otro. Se nota que ese pibe sabe.
Premio Chenemigo: Cucu. Preguntaba porqué se había ganado un chenemigo. El sábado encontró la respuesta. Desastroso.
Premio Ghandi: Darío. No iba a estar presente, pero ante la ausencia de un jugador de su equipo corrió hasta el estadio para jugar.
Premio Terminator. Joni. Dos patadones sobre Cucu que le dolieron a todos. Rustico.
